500 g garbanzos
1 conejo troceado
1 cebollita
1 rama de apio
3 c/s de pimientos del piquillo
3 c/s de salsa de tomate
3 dientes de ajos
1 trozo de pan cateto
aceite de oliva virgen extra
4 granos de pimienta negra
1 c/c de pimentón de la Vera
1 hoja de laurel
perejil
sal
PREPARACIÓN:
Ponemos los garbanzos que hemos tenido en remojo desde la noche anterior, a cocer con sal y una hoja de laurel. Durante unos quince minutos más o menos, en la olla rápida.
Según sea el tipo de garbanzo necesitará más o menos tiempo.
Al apio le quitamos las hebras.
Rehohamos, y agregamos las tres cucharadas de pimiento del piquillo y los granos de pimienta.
Cuando esté pochado, le añadimos la salsa de tomate.
Como a mí no me gusta las verduras en trozos, pues le ponemos un poquito de agua de los garbanzos y pasamos por la batidora.
En una satén pequeña con un poco de aceite freímos el pan y los dos dientes de ajos. En el vaso batidor ponemos el pan, los ajos, un poquito de perejil. Sólo las hojas y un poquito de agua de los garbanzos, para que nos sea más fácil triturarlo. En la misma sartén tostamos el pimentón, con cuidado de que no se nos queme.
Ahora es el momento de agregarlo todo para unir sabores.
A la olla del refrito le añadimos los garbanzos con el agua necesaria, y lo del vaso de la batidora... el pan, los ajos y el perejil.
Le ponemos el conejo, el aceite con el pimentón y lo dejamos cocer a fuego lento.
Cuando el conejo esté hecho y los garbanzos en su punto, estará hecho el potaje. Sólo nos queda rectificar de sal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario